Ricardo Wiesse

Lima 1954

“El sello espiritual de una pintura supera amplísimamente al registro mecánico o fotográfico; la interpretación de lo objetivo de la naturaleza y lo subjetivo de la conciencia, el amarre de lo que uno ve, lo que uno pinta y el cuadro que resulta, perdura.”

R. W.

Wiesse es un artista que vincula su quehacer con la geografía, el paisaje y la realidad peruanos. Apoyado en el amor y conocimiento de nuestro paisaje esencial y lo que los antiguos peruanos hicieron de estas arenas, montañas mares y desiertos, dueño de un dibujo preciso y un audaz sentido cromático, Ricardo Wiesse utiliza la pintura y el dibujo como herramientas de conocimiento a través de las cuales revisita, reinterpreta y reconstruye espacios en sus lienzos.

A través de los años, Wiesse ha experimentado mucho sobre la materia, el cuerpo, la capacidad de dibujar, pintar. Es además un investigador de la antropología y la arqueología y mucho de su trabajo se relaciona con esas fuentes. A margen de su dedicación a las artes plásticas, ha publicado libros de ensayos e investigaciones sobre temas relacionados con el arte donde reflexiona sobre su proceso creativo para materializar contenidos que le resultan importantes y sobre la búsqueda de identidad a través de la exploración de la memoria familiar.

Sus pinturas abstractas son tal vez, la parte de su obra que ha sido más difundida. Partiendo del informalismo y el trabajo de texturas de sus momentos iniciales Wiesse se encaminó hacia una búsqueda donde la composición se apoya en grandes planos de color donde conjuntos dinámicos de líneas definen diagramas y patrones que nos sugieren cielos y geografías, referencias al pasado remoto de algunas culturas precolombinas y el arte peruano antiguo, sustentadas por una visión moderna proveniente del arte geométrico del siglo XX y otras vanguardias. En su trabajo reciente se produce un giro que incorpora sutilmente un interés por el estudio de ciertos desarrollos científicos (como los circuitos neuronales) a la exploración cromática y geométrica que siempre le interesa.

Ricardo Wiesse es un apasionado del paisaje de la costa peruana. La otra vertiente de su trabajo la compone una pintura paisajista de carácter monumental y de un realismo casi romántico. El paisaje que pinta Wiesse las más de las veces lo realiza in situ, trasladándose con frecuencia con sus materiales y herramientas a sitios arqueológicos o lugares cargados de significado que retrata al aire libre con precisión incansable.

Wiesse se relaciona como artista con el conjunto de la sociedad, a menudo alejándose de la pintura de caballete para realizar intervenciones de carácter urbano y gran escala como el mural de mosaico que a modo de serpiente del desierto recorre un tramo importante de la Vía Expresa en Lima, o protestar a través de la acción artística por la violación de los derechos humanos en “Cantuta” donde Wiesse y varios colaboradores realizaron una histórica intervención –artística y taumatúrgica– en la quebrada del distrito limeño de Cieneguilla donde se habían pretendido ocultar los restos de los desaparecidos de La Cantuta en el año 1992.

Ricardo Wiesse estudió Letras y Pintura en la Pontificia Universidad Católica del Perú, y Grabado en el Atelier 17 en París y en la Slade School of Fine Arts en Londres. Ha enseñado en diversas escuelas de Arte y es autor del mural cerámico de la Vía Expresa de Lima (10 000 m2). En 1995, ganó el Premio Johnnie Walker. Desde 1999, trabaja simultáneamente obras abstractas y figurativas. Expone en la Galería Forum de Lima desde 1980. En 2018, presentó una muestra antológica en la Galería ICPNA de Miraflores y dos exposiciones individuales, una en la Universidad de Rochester y otra en la Galería Modus Operandi de Madrid. En 2019, exhibió Pachacámac repintado en Santiago de Chile y Viña del Mar, y prepara una individual para el ICPNA de Arequipa. Sus trabajos forman parte de colecciones públicas y privadas en el Perú y el extranjero.

En 2005, publicó dos libros: Wiesse, pinturas y otros ensayos, y Papeles del vacío, arte y paisaje en el Perú. De 2009, es su libro Plumas del Antisuyo: Vilcabamba, raíz y piedra y, de 2010, A mano alzada, recolección de dibujos y trabajos en papel. En 2014, publicó Letra y música de María Wiesse y, en 2015, Breve historia de Chao.