Rocío Rodrigo 

Lima, 1960

“Siempre me ha interesado lo multidisciplinario, la necesidad de integración entre las artes… mi idea es integrar el video, la pintura, la fotografía y otras artes, porque en la era de las comunicaciones no se puede pensar de otra forma…”

R. R.

Rocío Rodrigo Prado partiendo de una perspectiva informada, pero libre y desprejuiciada realiza una obra que se desplaza con solvencia entre la tradición y la contemporaneidad.

Rodrigo Prado recurre a todo tipo de materiales, para trabajar obras en las que alterna el tallado, el pulido y el ensamblaje. Al lado de la madera, la piedra y el acero, incorpora con maestría luces de neón y elementos de reciclaje, como palitos, cañas, periódicos, telas, acrílicos, espejos, a sus propuestas. No le son, además, ajenos la instalación y el video.

Son numerosas las fuentes que nutren la obra de RRP, desde el renacimiento al arte popular. En ella siempre predomina la armonía, la proporción; Rocío recoge múltiples informaciones internas y externas y las vuelca en sus propuestas. Al uso de variados materiales, se suman el humor y un poco de ironía, pero el elemento más importante, es sin duda la pasión por lo que hace.

Sus obras nunca están quietas, interpelan, se desplazan, esperan una respuesta del espectador. Rocio transforma las figuras anatómicas en símbolos, crea seres vivos, con cuerpo y alma. Su propuesta, cada vez más sólida, aguda y lúcida consiste siempre en sacar imágenes de su maravilloso mundo interior. Ella es un punto de referencia de la plástica nacional.

Graduada con honores en 1986 de la Pontificia Universidad Católica del Perú, En 1988 obtuvo la Beca Mombusho del Gobierno japonés y ha recibido numerosos premios y reconocimientos.

Además de exponer su obra en forma individual en muchas ocasiones, Rocío ha participado en innumerables talleres de arte, ejerce la docencia y ha sido expositora en diferentes paneles sobre arte.

Actualmente vive y trabaja en Lima.