“El proyecto nació años atrás en medio de conversaciones que nos llevaron a ser más concientes de nuestras diferencias y aceptarlas, consolidando nuestra amistad. Decidimos llevarlo al campo estético, reconociéndolo como parte importante en nosotros, para darle materia a todo lo tácito. El reto es ahora la búsqueda de la tolerancia para presentar una coexistencia armónica alimentada por sus naturales diferencias creando un mundo de equilibrio. El sueño inasible y los juegos de niños han comenzado”. El reaultado de estas disquisiciones, convertido en reto en el campo de las artes y de la estética es lo que se aprecia en esta exposición. Ambos artistas, son destacados egresados de la Facultad de Arte de la Universidad Católica. Lorena obtuvo una beca de especialización en la Universidad Prefectural de Fukushima, Japón. Aldo obtuvo el premio Adolfo Winternitz al primer puesto de su promoción en escultura. Artistas de sensibilidad muy fina y estupenda factura en la realización de la obra: humor, poesía, pensamiento elaborado, realización esmerada y mucha sorpresa, es lo que encontraremos al enfrentar la exhibición bipersonal que estos dos estupendos jóvenes artistas nos han preparado.